10 minutos con sonido
No puedes negarme absolutamente nada, cada vez que se me antojan unos zapatos ahí estas tu, como buena perra, dispuesta a pagarlos. Yo pido y tu pagas, así de fácil y rápido, sin pestañear si quiera, sin hacerme esperar, sabes que solo eres feliz complaciéndome, ademas te pones como una perra en cela cuando ves mis preciosos pies luciendo los zapatos que tu compras.